Remembranzas: Screening privado de Amir



 El 19 de Diciembre del 2014 es un día que siempre recordaré con mucha nostalgia ya que esa noche fue la primera vez que mostramos “Amir” en una sala de proyección, la cual en este caso fue la del Café Cinemático en el Centro. Fue un evento privado en donde solo invitamos a los miembros del cast y crew con una o dos excepciones, pero fue la primera vez que a todos les cayó el veinte que todo lo que nos habíamos matado meses antes, todos los sacrificios que hicimos, todas las horas que le invertimos a este proyecto valieron la pena. Por supuesto, va a llegar el día en el que este proyecto se muestre abierto al público en el CECUT (Carlos Sarabia ya me dio la luz verde de antemano), pero esta noche siempre va a ser muy especial. “BUENOS TIEMPOS” es un largometraje que se grabó durante casi un año ya que en dos ocasiones tuve que parar el rodaje, y mientras que fortaleció la relación entre algunos de nosotros como creadores, no creó el ámbito casi familiar que se fundó cuando hicimos “Amir” ya que fue más intenso y convivimos muchísimo más. Esta noche fue como una reunión después de no habernos visto por un par de meses, y aunque de los tres protagonistas faltaron dos (Jorge Guevara y Tania Niebla), fue bastante emotivo simplemente verlos juntos nuevamente. Ya va a ser casi un año de que se llevó a cabo, y solo con el tiempo me doy cuenta de que fue más significativo de lo que en el momento pareció serlo. Para empezar, mi productora Marla Arreola estaba por irse a vivir al DF dos semanas después de la muestra, así que, en cierta forma, la estábamos despidiendo esa noche. Esa vez contamos con la presencia de Chuy Padilla, obviamente sin tener idea de que cuatro meses después moriría. Y finalmente, se llevó a cabo en el Cinemático Café, el cual acaba de cerrar sus puertas de manera definitiva hace unas semanas atrás. Esos detalles le dan un toque muy melancólico a ese recuerdo, y aprovecho mi retorno al blog para hablar de esta hermosa remembranza.

Pues bien, esa noche era viernes, fui a trabajar como cualquier otro día, y al salir me dirigí derechito al Café Cinemático. En días como esos me encantan ir a trabajar ya que solo estoy viendo el reloj, esperando con ansias que sea la hora de salir. Pues bien, llegué al Café y al mismo tiempo había llegado Nathalia Estrada, quien había trabajado en el Arte de la película. La saludé brevemente, y una vez haciéndolo me dirigí al Sanborns a comprar unos puros para celebrar más tarde. Al regresar ya estaban mis productores Marla y Brijandez en el Café. Recuerdo que estábamos los tres, acompañados por Nathalia, sentados en una de las mesas, platicando de lo que estaba por venir. Poco a poco fue llegando la gente del cast y crew. Era tan exclusivo el evento que no dejamos que llevaran a sus parejas, lamentablemente se nos olvidó decírselo a Miguel Ruiz, quien hizo la música de la película, y quien llevó a su novia. Pues ya que!

Llegó el momento en el que los pasamos a la sala. Ahora, el mini cine del Cinemático era bastante pequeño, solo cabían de 15 a 20 personas, tal vez un poco más si sumían la panza y hacían espacio, así que en realidad no habían muchos presentes. En una de esas, y de una manera muy repentina, llega Gil González Penilla, director de “Los Hamsters”, “¿Qué haces aquí?” le digo, y me contesta “Si quieres me voy”. Obvio no quería que se fuera, solo me sorprendió su presencia porque ni siquiera sabía que estaba en Tijuana, pero por mí no había problema, especialmente cuando hace tiempo atrás queríamos que viera el primer corte de la película para que nos aconsejara en la edición, ya que cuando no anda dirigiendo allá en el DF. anda editando. Otra persona que no formó parte del rodaje y más sin embargo estuvo presente fue Rodrigo Álvarez debido a que queríamos que nos apoyara y aconsejara sobre en que festivales meternos y en cuáles no. 

Pues bien, llegó la hora de comenzar, y presentes estábamos yo, Brijandez, Marla, Nathalia, Chuy, Rodrigo, Gil, Miguel y su novia, Iván Gómez (Fotógrafo), José Del Razo (Asistente de Producción), Ricardo Carreño (Sonido post-producción), Lirio Karina (Actriz), Fernando Fisher (Actor), y Pedro Rodman (Actor, por supuesto). Creo que fueron todos. Como pueden ver, estuvo tranquila la muestra.
Pues bien, yo, Mickey y Marla dijimos unas palabras de introducción, les agradecimos su presencia, y el show comenzó. 

Ahora, este no era el corte definitivo de la película, no se le había hecho absolutamente nada a la post-producción ni en audio ni en imagen. La imagen no me preocupaba mucho ya que de origen me gustaba mucho como se veía, pero el audio estaba completamente desfasado y le urgía una ecualización. Yo estaba consciente de esto, y se los dije antes de que iniciara la película. Sin embargo, cuando comenzó, no pude durar ni 5 minutos cuando salí corriendo de la sala hacia el cuarto de proyección ya que el audio se oía horrible. Unas escenas se escuchaban más que otras, unas tenían más cuerpo que otras. Todo un caos. Salí del cuarto no tanto por vergüenza, sino para ver que podíamos hacer para solucionarlo ahí en el momento. Lo que tuvimos que hacer es estar al pendiente de cómo se oía y determinar si le bajábamos el volumen o no directamente desde el cuarto de control. Al poco tiempo de que salí también salió Marla por el mismo motivo. Aquí nos pusimos todos muy nerviosos ante esto. Bueno, tal vez Brijandez no, pero Marla y yo sí. Gracias a Dios ese cuarto tenía una puerta hacia el patio, así que me salí a fumarme como mil cigarros, “No la debimos haber mostrado” le dije a mi productora. Fue aquí cuando nos tomamos esta foto de abajo. Creo que se nota un poco mi frustración.
Pues bien, 1 hora con 36 minutos después terminó la película. Pasamos nuevamente al frente a dar las gracias y era hora de que todos nos fuéramos a celebrar a algún bar de por ahí. Pedro Rodman levantó la mano diciendo “¿No va haber preguntas y respuestas?”, “Pues… en el bar”, le contesté. Sin embargo era obvio que quería decir algo, así que lo dejamos que se expresara, y lo que expresó fue una genuina admiración hacia lo que acababa de ver. Pedro había leído todo el guion desde el comienzo, y desde el comienzo le gustó lo que leyó, pero, por lo que dijo en ese momento, nunca se imaginó que iba a ser lo que fue. De la misma manera Miguel, el músico, expresó su admiración, al igual que Chuy, aunque este último señaló que había mucho diálogo, lo cual es entendible ya que acababa de formar parte de “Workers”, filme en que los personajes no dicen una sola palabra hasta cada 5 o 10 minutos. Pues bien, hasta ahí dejamos de hablar y decidimos seguirle en un bar llamado Yadira´s que se encontraba a la vuelta de la esquina. Mientras iba saliendo Chuy se despidió diciéndome que estaba puesto para la siguiente película que hiciéramos, y le dije que muchas gracias y que por supuesto. Esa fue la última vez que lo vi.


Íbamos en camino al Yadira’s, yo saco mis puros que compré anteriormente en el Sanborns y comienzo a fumármelo. “Ahorita vamos hablar de tu película Paredes” me dijo Gil. Wow! Eso no sonaba como algo bueno, pero pues a eso se expone uno al mostrar su trabajo.

Llegamos al lugar, pedimos cheves, cotorreamos entre todos, ya saben cómo es la cosa. Dos personas llegaron ahí al lugar. La primera fue Yvette Carrillo, la hermosa actriz que recientemente se encuentra estudiando en la UABC y que fue tan amable de asistirnos con el teaser que sacamos al principio de ese año  (El cual estrenamos en la muestra de “BUENOS TIEMPOS” en el Ciclo de Cine Independiente en Marzo del 2014) ya que la actriz principal, Tania Niebla, no estaba en la ciudad y ocupábamos hacer ese teaser. Originalmente ella estaba invitada al screening, pero llevó a unos amigos y, pues, era privado, así que no quiso dejar a sus amigos solos. La otra persona que también llegó al Yadiras fue Vladimir Aguirre, quien es uno de los gaffers más talentosos de la ciudad hasta donde yo sé, igual y tiene muchísimos más talentos y yo ni en cuenta. “Me hubieran llamado para ayudarles con la película“, me dijo, y le respondo “Pues sí queríamos, pero según teníamos entendido que sales caro, y la neta no teníamos lana”, “No mames Paredes!” me responde. Pues bien, ya estábamos pisteando cuando Gil finalmente nos dio sus dos centavos. Bueno, en realidad no nos dio su opinión oficial ya que era apenas un segundo corte, pero su queja ahí fue más que nada la edición. “Aquí en Tijuana no saben editar!” nos dijo de una manera, debo admitir, muy exaltada. Ciertamente le hacía falta otra repasada a la edición, es por eso que el 23 de Diciembre, 4 días después de la muestra, Gil vino a mi casa, repasamos la película entera, y nos aconsejó sobre ciertos detalles que pudieran mejorar. La película pasó de 96 a 88 minutos de duración. Tal vez no parezca que fue mucho el cambio, pero créanme, sí lo fue. Rodrigo en realidad no dijo nada, o no recuerdo que haya dicho nada, solo le seguía la onda a Gil sobre los detalles que había observado de la edición.  En realidad fue muy poco lo que se quedó Rodrigo al comienzo, se tuvo que retirar por un rato, pero nos prometió que regresaría más tarde. 

Como dos o tres horas después regresó, y nos agarró ya con unos cuantos tragitos encima, esta vez estábamos todos en la sección para fumadores. Para entonces ya muchos se habían retirado, entre ellos Lirio Karina, quien me agradeció por la oportunidad de haberla agarrado para el proyecto. Como se le quiere a mi querida prima! (Es prima hermana de mis primos hermanos). Rodrigo nos acompaña en la conversación. Ahora, ya estaba un poco alcoholizado, no sé cómo llegamos a lo que estábamos por llegar, pero por alguna razón estábamos hablando sobre el motivo por el cual quisimos que Rodrigo estuviera ahí, así que decidimos hablar sobre que festivales fueran buenos para mostrar la película.  Ahora, estábamos ahí celebrando el hecho de que el proyecto que tanto trabajamos estaba prácticamente hecho. Estábamos contentos de que ahora todos formábamos parte de un largometraje tijuanense. Lo último que ocupábamos escuchar era en que festivales “Amir” iba a ser rechazado. Sin embargo, para eso estaba Rodrigo, así que me pareció razonable que comenzara a hablar de eso, pero Rodman no sabía cuál era el papel de Rodrigo. “Tu película no va a quedar en este’’’ festival! Tu película no va a quedar en este otro festival” etc. Pedro lo interrumpe y le dice:

Pedro: “Haber, haber! Espérame tantito! Tal vez estoy confundiendo tu seguridad sobre este tema con soberbia, pero ¿Con que huevos te atreves a decirnos lo que puede o no puede pasar con la película? ¿Tú que has hecho?

Rodrigo: He hecho dos cortometrajes que se han mostrado en distintas partes del mundo (“Luciano” y “Memin: Crónicas de un Boxeador”).

Pedro: Dos cortometrajes (Pedro comienza a aplaudir) Bravo! Felicidades! Eres todo un experto!

Todos nos quedamos paralizados, viéndonos los unos a los otros, y poco a poco se fue intensificando la discusión entre Pedro y Rodrigo. Mickey quiso calmar la cosa, pero no funcionó, así que solo vimos como ambos discutían. Recuerdo como apagaba mi cigarro mientras que al mismo tiempo ya estaba encendiendo el siguiente. Después de unos 15 o 20 minutos ya se calmó un poco la cosa y todo volvió a la normalidad, y al poco tiempo cerraron el lugar.  Salimos a la banqueta y ahí estuvimos todavía un buen rato platicando, ya solo quedábamos muy pocos. Antes de que cada quien se fuera a su casa Rodrigo nos dice, “Estoy ansioso por trabajar con ustedes”. Irónicamente, apenas hace unos meses decidió no apoyarnos y no tener ninguna relación con el proyecto ya que no le traía ningún beneficio a él o a su nueva casa productora hacerlo. Oh well, así son los negocios.

A las 3:30 am llegué a mi casa, me estaba poniendo la pijama, y en eso miro a mi celular y tenía un mensaje de texto de Marla, diciendo que estaba muy orgullosa por formar parte de este proyecto, y era precisamente eso mismo lo que yo pensaba en ese momento mientras dormía. Fue una noche muy satisfactoria y estaba muy contento y agradecido de haber contado con el equipo que conté durante este rodaje. Como a las 4am quedé dormido… y a las 5am sonó mi alarma para irme a trabajar. 

Muchas cosas han pasado desde ese entonces con esta producción. Cosas buenas y malas, Cambios drásticos y otros sutiles, Decepciones y Admiraciones. Pero pienso que esa noche fue la última en la que nos comportamos como una familia. Yo sé que aún falta el estreno oficial, pero no será lo mismo. Llevábamos tiempo sin vernos cuando se llevó a cabo ese screening, pero aún teníamos la cercanía que tuvimos durante todo el rodaje. Pero ahora un año ha pasado, y en ese año la mentalidad de muchos ha cambiado, incluyendo la mía. Todos se fueron eventualmente por su camino para seguir con otros proyectos, tal como debe ser.  Menos yo. Yo sigo con “Amir”, y seguiré mientras el proyecto tenga vida. Yo creo que eso fue lo que mayormente definió la noche: En cierta forma fue una despedida en lo que cada uno se fuera por su lado. Ahora solo nos queda esperar vernos todos nuevamente el día del estreno. Espero sea igual de placentero, y estoy seguro que lo será, pero siempre recordaré ese momento en el cuarto de proyección en el que los tres que comenzamos el proyecto esperábamos con ansias que terminara.

1 comentarios:

Jorge Guevara dijo...
11:06 a.m.

Awebo, salgo en la última foto :p